lunes, 29 de julio de 2024

PROTOCOLO DE PREVENCIÓN AL SUICIDIO




Es
te documento presenta una propuesta de acciones a seguir en la detección, captación y seguimiento del intento de suicidio y abordaje de postvención del suicidio en familiares. Este material tambien procura promover procesos que permitan mejorar el circuito de prevención a las y los adolescentes con comportamientos autolesivos y tentativa de suicidio.

¿Que se entiende por suicidio? “Se entiende al suicidio como un fenómeno multi-causal en el que interactúan factores del orden individual, familiar, social y comunitario. Esta multi-causalidad determina la complejidad del fenómeno y, por lo tanto, la necesidad de abordarlo de manera integral, considerando todas las dimensiones y sus interrelaciones”. El suicidio constituye un proceso que recorre desde la ideación suicida, la elaboración de un plan, el intento, hasta llegar muchas veces a la concreción del suicidio, siendo la detección, captación y abordaje oportuno, las principales acciones de los equipos de salud frente al mencionado proceso. Las muertes por suicidio son prevenibles, siempre que se cuente con información respecto de los factores que intervienen en ellas y se desarrollen programas de prevención y tratamiento oportunos.

La prevención del suicidio es un tema crucial que implica una combinación de factores como apoyo emocional, acceso a recursos de salud mental y educación pública.  

Los protocolos de prevención del suicidio son guías detalladas y sistemáticas diseñadas para ayudar a identificar, evaluar y manejar adecuadamente situaciones de riesgo de suicidio. Alguno puntos fundamentales a tener en cuenta  en un protocolo básico de prevención del suicidio son:

  • 1- Evaluación inicial: Cuando se sospecha que alguien puede estar en riesgo de suicidio, es crucial realizar una evaluación inicial. Esto implica observar signos de advertencia como cambios en el comportamiento, expresiones de desesperanza o ideación suicida directa.

  • 2- Establecimiento de una relación empática: Es importante establecer una relación de confianza y empatía con la persona en riesgo. Esto puede involucrar escuchar activamente, validar sus sentimientos y preocupaciones, y demostrar comprensión y apoyo.

  • 3- Preguntas directas sobre el suicidio: No temas hacer preguntas directas sobre el suicidio. Preguntar sobre los pensamientos, planes o intenciones suicidas puede ayudar a evaluar el riesgo de manera más precisa.

  • 4- Evaluación del riesgo: Utiliza herramientas de evaluación de riesgo, como escalas de valoración de suicidio, para determinar la gravedad del riesgo y la necesidad de intervención inmediata.

  • 5- Seguridad inmediata: Si la evaluación revela un riesgo significativo de suicidio, es fundamental garantizar la seguridad inmediata de la persona. Esto puede implicar retirar medios letales, como armas de fuego o medicamentos, y proporcionar un entorno seguro y supervisado.

  • 6- Intervención de crisis: Proporciona apoyo emocional y ayuda a la persona a manejar la crisis. Esto puede incluir la conexión con servicios de salud mental de emergencia, líneas de ayuda o servicios de chat en línea.

  • 7- Desarrollo de un plan de seguridad: Trabaja con la persona en riesgo para desarrollar un plan de seguridad detallado. Este plan puede incluir estrategias para manejar crisis futuras, identificar personas de apoyo y recursos de intervención en caso de emergencia.

  • 8- Referencia a servicios de salud mental: Facilita el acceso a servicios de salud mental a largo plazo, como terapia individual o grupal, tratamiento psiquiátrico y programas de apoyo comunitario.

  • 9- Seguimiento y monitoreo continuo: Realiza un seguimiento regular para evaluar el progreso de la persona y garantizar que esté recibiendo el apoyo adecuado. Esto puede implicar citas de seguimiento, llamadas telefónicas o mensajes de seguimiento.

  • 10- Colaboración interdisciplinaria: Trabaja en colaboración con otros profesionales de la salud mental, como psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales y médicos de atención primaria, para garantizar una atención integral y coordinada.

Es importante recordar que los protocolos de prevención del suicidio deben adaptarse a las necesidades específicas de cada individuo y situación, y deben ser implementados por profesionales capacitados en salud mental.


¿Qué hacer en caso de que alguien esté expresando ideas suicidas?

Es fundamental abordar la situación con sensibilidad y cuidado. Aquí hay algunos pasos a seguir de cómo actuar en el momento:

  • Mantén la calma y escucha: Es importante mantener la calma y brindar una escucha activa y compasiva. Asegúrate de prestar atención a lo que la persona está diciendo sin juzgarla.

  • Consultar sobre ideas suicidas de manera directa: No tengas miedo de preguntar directamente si la persona está pensando en hacerse daño o en suicidarse. Hacer esta pregunta puede abrir la puerta para que la persona comparta sus sentimientos y pensamientos y de esta manera poder prevenirlos o anticiparnos. 

  • Toma las amenazas en serio: Independientemente de si crees que la persona realmente intentará suicidarse, siempre debes tomar las amenazas de suicidio en serio y responder de manera adecuada.

  • Ofrece apoyo emocional: Hazle saber a la persona que estás allí para ayudarla y que se preocupa por ella. Exprésale tu apoyo y empatía.

  • Evita el juicio y el enjuiciamiento: Evita hacer juicios o expresar enjuiciamiento hacia la persona por tener pensamientos suicidas. La empatía y la comprensión son fundamentales en esta situación.

  • No prometas mantener secretos: Es importante no prometer mantener en secreto la situación. Si crees que la persona está en peligro, es esencial buscar ayuda profesional y apoyo.

  • Anima a buscar ayuda profesional: Anima a la persona a buscar ayuda profesional. Puedes ofrecer acompañarla a una cita con un terapeuta, médico u otra fuente de apoyo.

  • Presta atención a la seguridad inmediata: Si la persona está en peligro inmediato, asegúrate de tomar medidas para garantizar su seguridad. Esto puede incluir retirar cualquier medio letal presente y buscar ayuda de emergencia.

  • Conecta a la persona con recursos de apoyo: Proporciona información sobre líneas de ayuda, servicios de intervención en crisis y recursos de salud mental disponibles localmente.

  • Haz un seguimiento: Después de la conversación, haz un seguimiento con la persona para asegurarte de que esté recibiendo el apoyo necesario y que esté conectada con los recursos adecuados.

Recuerda que si la situación parece ser una emergencia inminente, no dudes en llamar a los servicios de emergencia locales o a una línea de ayuda de crisis para obtener ayuda inmediata. La seguridad y el bienestar de la persona en riesgo son lo más importante.


 

PROTOCOLO DE ACTUACIÓN FRENTE A CASO DE VIOLENCIA DE GÉNERO

 



Definición de violencia y acoso

Se consideran hechos de violencia y acoso por motivos de género, a las conductas que, basadas en una relación desigual de poder, afecten:

  • la vida;

  • la libertad;

  • la dignidad;

  • la integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial; o

  • la seguridad personal o carrera laboral de mujeres y personas LGTBI+.

Tipos de violencia (art.5, Ley 26.485):

1.- Física: La que se emplea contra el cuerpo produciendo dolor, daño o riesgo de producirlo y cualquier otra forma de maltrato o agresión que afecte su integridad física.

2.- Psicológica: La que causa daño emocional y disminución de la autoestima o perjudica y perturba el pleno desarrollo personal o que busca degradar o controlar sus acciones, comportamientos, creencias y decisiones, mediante amenaza, acoso, hostigamiento, restricción, humillación, deshonra,  descrédito, manipulación o aislamiento. Incluye también la culpabilización, vigilancia constante, exigencia de obediencia o sumisión, coerción verbal, persecución, insulto, indiferencia, abandono, celos excesivos, chantaje, ridiculización, explotación y limitación del derecho de circulación o cualquier otro medio que cause perjuicio a su salud psicológica y a la autodeterminación.

3.- Sexual: Cualquier acción que implique la vulneración en todas sus formas, con o sin acceso genital, del derecho de decidir voluntariamente acerca de su vida sexual o reproductiva a través de amenazas, coerción, uso de la fuerza o intimidación, incluyendo la violación dentro del matrimonio o de otras relaciones vinculares o de parentesco, exista o no convivencia, así como la prostitución forzada, explotación, esclavitud, acoso, abuso sexual y trata.

4.- Económica y patrimonial: a través de: 

  1. La perturbación de la posesión, tenencia o propiedad de sus bienes;

  2. La pérdida, sustracción, destrucción, retención o distracción indebida de objetos, instrumentos de trabajo, documentos personales, bienes, valores y derechos patrimoniales;

  3. La limitación de los recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades o privación de los medios indispensables para vivir una vida digna;

  4. La limitación o control de sus ingresos, así como la percepción de un salario menor por igual tarea, dentro de un mismo lugar de trabajo.

5.- Simbólica: La que a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos transmita y reproduzca dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, naturalizando la subordinación de la mujer en la sociedad.

Modalidades. (art.6, Ley 26.485) : se entiende por modalidades las formas en que se manifiestan los distintos tipos de violencia en los diferentes ámbitos, quedando especialmente comprendidas las siguientes:

a) Violencia doméstica: aquella ejercida por un integrante del grupo familiar, independientemente del espacio físico donde ésta ocurra. Se entiende por grupo familiar el originado en el parentesco sea por consanguinidad o por afinidad, el matrimonio, las uniones de hecho y las parejas o noviazgos. Incluye las relaciones vigentes o finalizadas, no siendo requisito la convivencia;

b) Violencia institucional: aquella realizada por las/los funcionarias/os, profesionales, personal y agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tenga como fin retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres tengan acceso a las políticas públicas y ejerzan los derechos previstos en esta ley. Quedan comprendidas, además, las que se ejercen en los partidos políticos, sindicatos, organizaciones empresariales, deportivas y de la sociedad civil;

c) Violencia laboral: aquella que discrimina en los ámbitos de trabajo públicos o privados y que obstaculiza su acceso al empleo, contratación, ascenso, estabilidad o permanencia en el mismo, exigiendo requisitos sobre estado civil, maternidad, edad, apariencia física o la realización de test de embarazo. Constituye también violencia contra las mujeres en el ámbito laboral quebrantar el derecho de igual remuneración por igual tarea o función. Asimismo, incluye el hostigamiento psicológico en forma sistemática sobre una determinada trabajadora con el fin de lograr su exclusión laboral; 

d) Violencia contra la libertad reproductiva: aquella que vulnere el derecho de las mujeres a decidir libre y responsablemente el número de embarazos o el intervalo entre los nacimientos, de conformidad con la Ley 25.673 de Creación del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable;

e) Violencia obstétrica: aquella que ejerce el personal de salud sobre el cuerpo y los procesos reproductivos de las mujeres, expresada en un trato deshumanizado, un abuso de medicalización y patologización de los procesos naturales, de conformidad con la Ley 25.929.

f) Violencia mediática: aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipados a través de cualquier medio masivo de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación o sus imágenes, injurie, difame, discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad, como así también la utilización de adolescentes y niñas en mensajes e imágenes pornográficas, legitimando la desigualdad de trato o construya patrones socioculturales reproductores de la desigualdad o generadores de violencia contra las mujeres.

Principios rectores al tomar conocimiento de un caso

El abordaje a la persona víctima de violencia se rige por los siguientes principios:

  • Escucha activa y empática de quien recibe las consultas, con actitud receptiva, sin críticas ni prejuicios, que favorezca la comunicación por parte de quien consulta.

  • Confidencialidad y respeto, ser escuchada sin menoscabo de su dignidad y sin intromisión en aspectos irrelevantes para el conocimiento de los hechos. En todo momento se debe respetar la confidencialidad de los datos que se quieran mantener en reserva.

  • No revictimización. Se evitará la reiteración innecesaria del relato de los hechos, como también de la exposición pública de la persona denunciante o de los datos que permiten identificarla.

  • Contención y orientación. La persona afectada será orientada en la realización de la denuncia administrativa; el procedimiento que sigue a la denuncia; las acciones y medidas preventivas que puede solicitar.

  • Acceso a la información, tienen derecho a recibir información acerca del estado de las actuaciones, de las medidas adoptadas y de la evolución del proceso.

Que hacer en caso de tomar conocimiento 

  • Conocer las características emocionales que presenta la persona en situación de violencia, es el primer paso. Es posible que se nieguen a realizar una denuncia por sentirse inhibidas para actuar, por temor a represalias, por ausencia de redes de apoyo social, porque se encuentran afectadas por el estrés postraumático, porque carecen de recursos, por vergüenza o culpa. Es importante brindarle apoyo y remarcarles que no es su culpa.

  • Entender que la violencia de género no es un "asunto privado" y nos compete a todos.

  • Brindar una escucha activa y empática: es clave estar, comprender y no juzgar. "Solo debemos escuchar a esa mujer y preguntarle cómo podemos darle una mano. Y si no la conocemos mucho, le podemos decir que intuimos lo que le está sucediendo, que si quiere contarnos algo, que cuente con nosotros.

  • Se debe poner en contacto con la autoridad competente a fin de accionar sus protocolos de abordaje por medio de las siguientes acciones:


  1. Llamar al 911 ante una emergencia: por ejemplo, si escuchamos gritos o golpes o visualizamos la acción.  Todas las llamadas al 911 son anónimas.

  2. Realizar llamada al servicio de Emergencias Médico en caso que presente lesiones evidentes o referidas, en caso que su condición lo permita, puede optar por trasladarla a la Guardia médica más próxima para recibir la atención correspondiente. El personal que tome conocimiento de los hechos realizará el asesoramiento necesario.

  3. Otra opción es concurrir a realizar la denuncia al organismo público fiscal, o destacamento policial más próximos.

Si hay dudas sobre el proceder, pedir asesoramiento: llamando a la línea 144, que funciona las 24 horas, los 365 días del año y es atendida por especialistas en la materia. Además, es anónima, gratuita y nacional. Es posible también, contactarse por via mail a linea144@mingeneros.gob.ar y por WhatsApp al (+54) 1127716463. Además, se puede bajar una App gratuita al celular buscando 144 desde Android o App Store. 


Anexos Informativos:

  • PROTOCOLO MARCO PARA EL ABORDAJE DE LAS VIOLENCIAS POR MOTIVOS DE GÉNERO EN EL SECTOR PÚBLICO NACIONAL. Decisión Administrativa 1012/2021

https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/355767/texto

  • Violencia de género - Sistema único de registro de denuncias

Resolución 408/2020 Ministerio de Seguridad

https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/violencia-de-genero-sistema-unico-registro-denuncias

  • Ley Micaela - Capacitación en género y violencia contra las mujeres - Ley 27.499

https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/ley-micaela-capacitacion-en-genero-y-violencia-contra-las-mujeres

  • LEY MICAELA DE CAPACITACIÓN OBLIGATORIA EN GÉNERO PARA TODAS LAS PERSONAS QUE INTEGRAN LOS TRES PODERES DEL ESTADO

https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/ley-27499-318666/texto

  • Violencia contra la mujer - Ley 26.485

https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/violencia-contra-la-mujer

  • CONVENCION DE BELEM DO PARA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER - SU ERRADICACION- Ley 24632

https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/ley-24632-36208/texto

  • Identidad de género - Ley 26.743

https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/identidad-de-genero

  • Programa para el apoyo urgente y la asistencia integral inmediata ante casos de violencias extremas por motivos de género - Resolución 227/2021 Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad

https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/asistencia-integral-femicidio-travesticidio-transfemicidio

  • MODIFICACIÓN DEL CÓDIGO PENAL DE LA NACIÓN ARGENTINA SOBRE ACCIONES DEPENDIENTES DE INSTANCIA PRIVADA CÓDIGO PENAL - Ley 27455 

http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/315000-319999/315663/norma.htm


ATAQUES DE PÁNICO O CRISIS DE ANSIEDAD - ¿COMO ACTUAR?


¿Qué es el ataque de pánico?

La mayoría de los expertos definen un ataque de pánico como la aparición repentina de miedo intenso. Las personas que su
fren estos ataques se sienten abrumadas por
síntomas mentales y físicos, que pueden variar de una persona a otra. Sus corazones pueden acelerarse y palpitar como si le estuviera dando un ataque al corazón, pueden sentir que no pueden respirar, inclusive muchas veces les tiemblen las extremidades o sientan opresión en el pecho, llegando a tener la sensación de estar ahogados. 

Estos ataques se caracterizan por una ola repentina de temor o incomodidad, o bien, una sensación de perder el control, incluso cuando no hay un peligro real o un factor desencadenante claro. No todas las personas que tienen un ataque de pánico llegarán a tener un trastorno de ansiedad a futuro. 

Muchas personas con este trastorno se preocupan por la posibilidad de tener otro ataque y podrían hacer cambios considerables en sus vidas para evitarlo. 

Los ataques de pánico pueden ocurrir con mucha frecuencia como varias veces al día, o tan pocas como unas cuantas veces al año. A menudo, el ataque de pánico comienza al final de la adolescencia o a principios de la edad adulta. 

¿Cuáles son las señales y los síntomas del ataque de pánico?

EN PRIMER LUGAR, ES IMPORTANTE DESTACAR QUE PARA QUE UN ATAQUE DE PÁNICO  SEA CONSIDERADO COMO TAL, debe estar acompañado de al menos cuatro (4) de un total de 13 síntomas fisiológicos ó somáticos y cognitivos, que se inician bruscamente y alcanzan su máxima expresión dentro de los primeros 10 minutos. Las personas con ataques de pánico pueden tener: 

  1. La sensación de estar fuera de control, o de tener miedo a la muerte o a una fatalidad inminente.

  2. Falta de aliento o sensación de ahogo (disnea)

  3. Mareo, inestabilidad, o sensación de pérdida de conciencia.

  4. Palpitaciones o ritmo cardíaco acelerado

  5. Temblores

  6. Sudoración y Sofocación 

  7. Náuseas o molestias abdominales

  8. Despersonalizacion o desrealizacion

  9. Adormecimiento o sensación de cosquilleo (parestesia)

  10. Escalofríos o rubor repentino 

  11. Una preocupación intensa sobre cuándo ocurrirá el próximo ataque de pánico.

  12. Temor de ir o evitar ir a los lugares donde han tenido un ataque de pánico en el pasado.

  13. Dolor, opresión en el pecho. 

¿Cómo se puede calmar un ataque de pánico en el momento?

Si nunca sufriste un ataque de pánico, y sentís dolor en el pecho y falta de aire, lo aconsejable es ir a urgencias para confirmar que realmente estás teniendo un ataque de pánico, en lugar de un problema cardíaco. Pero si ya sufriste uno en el pasado, y te das cuenta de que estás empezando a tener otro, estos consejos pueden ayudarte en el momento. Puede ser útil practicar estas estrategias de afrontamiento con antelación, para poder emplearlas la próxima vez que se produzca un ataque de pánico:

HABLARSE A UNO MISMO: El primer paso consiste en que la persona sea consciente de lo que está sucediendo, entendiendo que lo que está vivenciando es una reacción exagerada ante un estímulo del medio. Esto le permitirá a la persona reducir un poco el nivel de ansiedad.  Es importante recordar que un ataque de pánico siempre termina y por lo general dura como máximo entre 10 y 30 minutos.  


UBICARSE EN UNA POSICIÓN CÓMODA Y DE RELAJACIÓN: La tensión muscular hace más difícil que el cuerpo de la persona afectada se libere de las hormonas del estrés, por eso es fundamental buscar un espacio cómodo, cálido y abierto. 


LLAMAR A REFERENTE FAMILIAR O AMIGO: Un amigo o familiar referente  de confianza puede ayudar a tranquilizar a una persona cuando sienta que empieza un ataque de pánico. El mero hecho de hablar con alguien sobre lo que la persona está experimentando y de nombrar las sensaciones que recorren su cuerpo, puede ayudarle a estabilizarse en el momento.


RESPIRAR DESDE EL DIAFRAGMA: La hiperventilación, una característica común de los ataques de pánico, puede hacer que las personas se sientan mareadas, por lo que respirar lentamente puede ser útil. Por lo general, los adultos respiran desde el pecho; en cambio, puede ser útil respirar desde el diafragma como lo haría un bebé, centrándose en la expansión del vientre. Esto puede ralentizar y profundizar nuestra respiración, inundando el cerebro de oxígeno y activando el sistema nervioso parasimpático, que ayuda a señalar que no necesitamos luchar y reduce los niveles de angustia. El fin de esta intervención, es hacer consciente a la respiración. 


TOMAR ALGO FRÍO: Buscar un cubito de hielo o poner un paño húmedo y frío en la muñeca puede funcionar. El choque del frío puede ayudar a centrarse en el presente; esto también ayuda a aliviar el incómodo calor y la sudoración que algunas personas sienten durante las crisis.


DESPLAZAMIENTO DEL CENTRO DE ATENCIÓN: Algunos terapeutas recomiendan algunos ejercicios sencillos para desplazar o distraerse de la ansiedad que se acumula en la mente. Ejemplos: 

  • Contar y nombrar los colores que te rodean. Decir cada uno de ellos en voz alta, o simplemente anotarlos en la mente. 

  • Describir la ropa que la persona lleva puesta. 

  • Describir el clima, fecha y estación del año. 

  • Escuchar sonidos o música que le guste.

  • Mirar algo que le agrade a la persona